En mi camino hacia un “minimalismo sostenible” he adoptado pequeñas acciones que, no sólo han supuesto un ahorro económico, sino que también han contribuido a reducir el número de residuos que generaba (zero waste). Hoy no te voy a hablar de recetas o tutoriales elaborados, sino de simples gestos que no suponen ningún tipo de esfuerzo y que están al alcance de todos. Empezar a ser una consumidora más responsable cuesta muy poco 😉 Estas son las 5 cosas que podrías dejar de comprar hoy mismo ¿Te animas?

1. Comida en envases de plástico de un solo uso. No cuesta nada comprar la fruta y la verdura en piezas enteras, en vez de adquirirlo todo troceado en bolsas o bandejas. ¿Te enteraste del caso de las naranjas peladas en botes de plástico? Todo un ejemplo de cómo los consumidores ganaron la batalla. Si todavía no estás convencida, repasa aquí las ventajas de comprar a granel. ¡Ah! y no te olvides de llevar encima tu propia bolsa de la compra.

Imagen: Organicus

2. Plantas aromáticas para cocinar. En realidad, esto está muy relacionado con el punto anterior, pero en este caso, voy un paso más allá. Sembrar un puñado de semillas de tus condimentos más utilizados para cultivarlas en casa, incluso en el interior de tu hogar, no cuesta nada y, casi me atrevería a decir, que está al alcance de todo el mundo. Repasa en este artículo 5 buenos motivos para hacerlo. Cierto es que durante los meses de invierno la cosa está más complicada, pero antes de que el frío llegue puedes conservarlas en el congelador tal y como te explicaba aquí. ¡Atención a la guía gratuita de Planeta verde para montarte un huerto! Y creo que en breve lanzan un súper curso online ¿Te lo vas a perder? Para animarte te dejo un pequeño spoiler de cómo van mis semilleros urbanos de plantas aromáticas.

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3. Tarros para la cocina. No hace falta guardar el arroz, la harina o los cereales en recipientes conjuntados con el color de tu cocina. Reutiliza los botes de cristal de las conservas como envases y como tuppers.

4. Tampones y compresas. Ya voy camino de cumplir tres años sin utilizar estos productos de higiene personal. La copa menstrual ha sido sin duda una de mis mejores adquisiciones: hipoalergénica, económica, etc. Todo son ventajas. Mariana de Cualquier cosita es cariño te da respuesta a todas tus preguntas en este enlace. 

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5.  Algodones para desmaquillarte. ¿La solución? Discos reutilizables. Si no te animas a fabricarlos por ti misma (tutorial aquí), puedes comprarlos. ¡Me acabo de dar cuenta de que mis toallitas llevan más de uno año conmigo! Están un poco destrozadas, pero todavía tiran 🙂 Irene Recolectora te da algunos consejos para limpiarlas.

Sobra decir, que también puedes empezar a fabricar tu propia ropa, customizarla para darle un segundo uso o empezar a comprarla de segunda mano. Precisamente, la semana pasada el Hervidero de ideas lanzó un debate sobre este tema (#segundamano). Te invito también a que descubras el reciclaje más modernete de la mano de 2nd Funniest thing y que aprendas que es una Swap party: Verónica de REfashion te explicaba todos los detalles en el segundo número de Eco Eco Magazine. Obviamente, también te animo a fabricar algunos productos del hogar y de cuidado personal. Ya sabes que la sección DIY de este blog está llena de tutoriales si quieres empezar. Por cierto, para todos los que me preguntáis: estoy haciendo todo lo posible para volver a tener disponibles los cursos online cuanto antes, palabra. Iré informando 😉

¿Más pequeños gestos que quieras compartir?